Sean y Gabby son una pareja estadounidense que desde hace un tiempo residen en Castellón, lugar dónde los dos trabajan impartiendo clases de inglés.

Sean se puso en contacto conmigo tras ver mi trabajo por las redes sociales. Me explicó que quería sorprender a Gabby pidiéndole matrimonio en un lugar tan mágico como Peñíscola!

Entre los dos elaboramos un plan para encontrarnos en la playa con el Castillo de Peñíscola como fondo. No os parece maravillosa la idea!!

Pues bien, yo me situé en un punto estratégico como si fuera un turista haciendo fotos jaja. Lo mejor de todo es que al ser en pleno octubre, la playa estaba vacía a esas horas.

Cuando vi a Sean llevarla a la playa, me acerqué sigilosamente para realizar unas fotos que recordarán toda una vida. Podéis ver a continuación la secuencia y unas fotos posteriores que hicimos cuando íbamos hacia el hotel dónde se alojaban.

La pedida de mano es un momento mágico para dos personas que deciden pasar su vida juntos. Y una gran experiencia cómo fotógrafo de bodas que espero poder repetir.

Espero que seáis muy felices pareja!